elerian162_ BRENDAN SMIALOWSKIAFP via Getty Images_biden BRENDAN SMIALOWSKI/AFP via Getty Images

Crece el riesgo de desorden mundial

CAMBRIDGE – El año 2023 no fue bueno para el orden económico mundial capitaneado por Occidente. Sorprende que el motivo principal no sea la aparición de un orden alternativo liderado por China, como algunos habían anticipado, sino el estrés interno que impulsó dudas en el mundo sobre su eficacia y legitimidad.

Es poco probable que surja un nuevo orden internacional en el corto plazo; en lugar de ello, a medida que más países deciden autoasegurarse creando alternativas al orden capitaneado por Occidente, la economía mundial corre el riesgo de una mayor fragmentación, que erosionaría el liderazgo estadounidense y aceleraría la transición sistémica hacia el desorden.

Ciertamente, las dudas sobre el orden económico capitaneado por Occidente comenzaron mucho antes de 2023: durante los últimos 15 años su credibilidad y aceitado funcionamiento se vieron socavados por errores políticos que derivaron en una serie de trastornos (como la crisis financiera mundial de 2008, el creciente uso como armas del comercio y de las sanciones a la inversión, la distribución desigual de las vacunas contra la COVID-19, la clasificación incorrecta de la inflación como «transitoria» por parte de los bancos centrales, y las consecuencias de las agresivas subas de las tasas de interés bancarias).

https://prosyn.org/CVbjGnUes