haseltine4_MANDEL NGANAFP via Getty Images_trump atlas Mandel Ngan/AFP via Getty Images

La inmunidad de rebaño no derrotará al COVID-19

NUEVA YORK – En un evento estilo “cabildo ciudadano” realizado el 15 de septiembre pasado por ABC News, el Presidente estadounidense Donald Trump dijo al presentador George Stephanopoulos que, incluso sin vacuna, el COVID-19 “acabaría por desaparecer”. Señaló que “con el tiempo, se desarrolla un rebaño… como una mentalidad de rebaño. Va a ser, va a desarrollarse como un rebaño, y así es como va a pasar”.

A lo que se refería, aunque con palabras equivocadas, era a la inmunidad de rebaño, que consiste en el desarrollo de una población cuando son tantos los miembros infectados o vacunados contra un contagio específico que una acumulación de resistencia contrarresta su propagación. Pero basar una estrategia de respuesta sobre el supuesto de que la inmunidad de rebaño es inevitable –con o sin vacuna- es darle al virus un camino de mínima resistencia. Fue el caso de Suecia, donde las autoridades decidieron no decretar confinamientos ni cierres de negocios en favor de consejos más permisivos sobre el uso de mascarillas y el distanciamiento social.

No es de sorprender que sus tasas subsiguientes de infecciones y mortalidad por COVID-19 llegaran a estar entre las más altas del planeta. Más aún, la economía sueca se contrajo en un 8.6% en el segundo trimestre de 2020 en comparación con los tres meses anteriores, cifra importante si se piensa en el énfasis que muchos partidarios de la inmunidad de rebaño ponen en la recuperación del crecimiento económico. Uno de ellos es Scott Atlas, que hace poco fue designado asesor de Trump y se ha manifestado en Fox News a favor del llamado modelo sueco.

https://prosyn.org/0pgrbifes