La situación Catch-22 de la UE

Copenhague: Existen signos preocupantes en cuanto a que el proceso de ampliación de la Unión Europea está perdiendo impulso. Sin embargo, la inclusión de países solicitantes de Europa central y del este, así como de la región báltica, sigue siendo el asunto más importante dentro de la agenda europea actual. Retrasarlo sería un error de proporciones históricas, puesto que los riesgos a la estabilidad europea serían mucho mayores que los costos de la ampliación.

La ampliación ciertamente plantea muchos problemas prácticos, pero la magnitud de los costos económicos no debe exagerarse. Después de todo, el PNB agregado de los 10 países solicitantes del ex-bloque socialista es menor que el de Holanda. De hecho, se espera que el apoyo estructural que tendrían que dar los miembros actuales a los nuevos sería menor al 4% del PNB holandés. En efecto, el costo total de la ampliación será menor que el incremento anual de los recursos de la Comisión de la UE generados por el crecimiento económico “normal”.

Por supuesto, los costos no son la única dificultad. Un problema adicional tiene que ver con el establecimiento, dentro de los países solicitantes, de estructuras administrativas y democráticas compatibles con las que existen hoy en la UE. No obstante, si los miembros actuales exigen a los potenciales condiciones demasiado estrictas, corren el riesgo de crear una situación Catch-22. En la novela con ese título, Joseph Heller describe una situación a la que se enfrentaron algunos pilotos de combate durante la Segunda Guerra Mundial: los médicos podían prohibir que un piloto que hubiera enloquecido volara, siempre y cuando el piloto en cuestión lo solicitara. Dado que el miedo ante el peligro es una reacción humana normal, cualquiera que solicitara no volar no podía estar loco y por lo tanto no se le podía prohibir volar. Eso es una situación Catch-22.

https://prosyn.org/WKWWFoRes