Michael Spence, a Nobel laureate in economics, is Professor of Economics Emeritus and a former dean of the Graduate School of Business at Stanford University. He is Senior Fellow at the Hoover Institution, Senior Adviser to General Atlantic, and Chairman of the firm’s Global Growth Institute. He serves on the Academic Committee at Luohan Academy, and chairs the Advisory Board of the Asia Global Institute. He was Chairman of the independent Commission on Growth and Development, an international body that from 2006-10 analyzed opportunities for global economic growth, and is the author of The Next Convergence: The Future of Economic Growth in a Multispeed World (Macmillan Publishers, 2012).
MILÁN – Hoy en día son muchos los comentarios económicos que enfatizan la “divergencia”: mientras los índices generales del mercado de valores se encuentran en altos históricos, o cerca de alcanzarlos, gran parte del resto de la economía lucha por recuperarse de una de las más graves desaceleraciones jamás vividas. Mientras el Russell 2000 sigue estando en un 5,4% a la baja, los índices S&P 500 y Russell 3000 han recuperado por completo sus niveles previos a la pandemia, y el Nasdaq, en el que predominan las compañías digitales y tecnológicas, ha subido cerca de un 26%.
Muchas han llegado a la conclusión de que el mercado está desvinculado de la realidad económica. Pero, si se ve desde otro ángulo, puede que los mercados de valores actuales estén en parte reflejando poderosas tendencias subyacentes, amplificadas por la “economía pandémica”. Los precios de las acciones y los índices de mercado miden la creación de valor para los propietarios del capital, lo cual no es lo mismo que la creación de valor en la economía más general, donde el trabajo y el capital tangible e intangible juegan todos un papel.
Es más, los mercados reflejan las expectativas de retornos reales que el capital tenga en el futuro. A la hora de medir el valor actual del ingreso laboral, sencillamente no existe un índice a futuro comparable. Por consiguiente, si se espera una recuperación económica significativa, las perspectivas para el ingreso tanto del capital como del trabajo serían similares, pero en el presente solo se reflejaría el futuro esperado del capital.
To continue reading, register now.
Subscribe now for unlimited access to everything PS has to offer.
Subscribe
As a registered user, you can enjoy more PS content every month – for free.
Register
Already have an account? Log in