El mecanismo de inestabilidad de Europa

MÚNICH – Para 2010, Europa iba a ser “la sociedad basada en el conocimiento más competitiva y más dinámica del mundo”. Esa fue la proclama oficial en 2000 de la Comisión Europea en la llamada Agenda de Lisboa. Pasó una década desde aquella promesa audaz, y es oficial: Europa es la rezagada del crecimiento mundial y no su adalid. Mientras que los actuales miembros de la UE crecieron 14% en los últimos diez años, Norteamérica creció el 18%, Latinoamérica el 39%, África el 63%, Oriente Medio el 60%, Rusia el 59%, Singapur, Corea del Sur, Indonesia y Taiwán el 52%, India el 104% y China el 171%.

Los europeos querían lograr su objetivo, entre otras cosas, mediante una mayor protección ambiental y más cohesión social –metas deseables, aunque ciertamente no estrategias de crecimiento-. La Agenda de Lisboa resultó ser una broma.

Al Pacto de Estabilidad y Crecimiento de Europa de 1995 no le fue mejor. Los países de la UE acordaron limitar sus déficits fiscales al 3% del PBI para asegurar la disciplina de la deuda bajo el euro, de modo que ningún país pudiera usar la nueva moneda para tomar a sus vecinos como rehenes y obligarlos a entrar en operaciones de rescate. En rigor de verdad, los países de la UE excedieron el límite del 3% 97 veces.

https://prosyn.org/yQYftIoes