Bajo una intensa presión de los Estados Unidos, los dirigentes de China han acordado en principio dejar flotar el renminbi, pero se niegan a decir cuándo lo harán. A medida que China liberaliza su mercado de capitales y elimina restricciones a los movimientos de capitales internacionales, resulta inevitable una divisa flotante; de lo contrario, China tendría que ceder el control de su masa monetaria y sus tipos de interés a los Estados Unidos. Sin embargo, los gobernantes de China hacen bien en aplazar esa decisión.
Bajo una intensa presión de los Estados Unidos, los dirigentes de China han acordado en principio dejar flotar el renminbi, pero se niegan a decir cuándo lo harán. A medida que China liberaliza su mercado de capitales y elimina restricciones a los movimientos de capitales internacionales, resulta inevitable una divisa flotante; de lo contrario, China tendría que ceder el control de su masa monetaria y sus tipos de interés a los Estados Unidos. Sin embargo, los gobernantes de China hacen bien en aplazar esa decisión.