PRINCETON – Si uno puede evitar un gran sufrimiento sin que le cueste nada, debe hacerlo. Es un principio ampliamente aceptado y difícil de rebatir. Pero los gobiernos occidentales están descuidando una oportunidad de reducir el enorme padecimiento de las enfermedades mentales, pese a que el costo neto sería nulo.
PRINCETON – Si uno puede evitar un gran sufrimiento sin que le cueste nada, debe hacerlo. Es un principio ampliamente aceptado y difícil de rebatir. Pero los gobiernos occidentales están descuidando una oportunidad de reducir el enorme padecimiento de las enfermedades mentales, pese a que el costo neto sería nulo.