berkley11_gettyimages_covax Getty Images

El valor agregado de la vacunación

GINEBRA – Más de seis meses después de que aparecieron las primeras vacunas contra el COVID-19, a todos debería quedarles claro que las vacunas por sí solas no van a frenar la pandemia; también necesitamos vacunaciones. Para muchos, cualquier demora en el acceso a las vacunas prolongará una crisis que ya ha afectado inconmensurablemente a muchas vidas, sustentos y economías.

El hecho de que inclusive quienes tienen un alto riesgo de contraer COVID-19 todavía no estén protegidos del todo demuestra la complejidad del desafío que implica aumentar la producción y vacunar a miles de millones de personas. Pero la pandemia también resalta la lucha perpetua y de larga data contra enfermedades infecciosas que enfrentan cientos de millones de personas todos los días.

Normalmente existe sólo una línea delgada que impide que los patógenos se propaguen en poblaciones humanas. Cuando se cruza esa línea, un pequeño brote de enfermedad localizado fácilmente puede escalar y convertirse en una crisis global a una velocidad vertiginosa. Dado que la vacunación muchas veces es la única manera de impedir que esto suceda, necesitamos con urgencia revisar la manera en que encaramos los programas globales de inmunización.

https://prosyn.org/5zPlnRRes