Carl Bildt was Sweden’s foreign minister from 2006 to 2014 and prime minister from 1991 to 1994, when he negotiated Sweden’s EU accession. A renowned international diplomat, he served as EU Special Envoy to the Former Yugoslavia, High Representative for Bosnia and Herzegovina, UN Special Envoy to the Balkans, and Co-Chairman of the Dayton Peace Conference. He is Co-Chair of the European Council on Foreign Relations.
ESTOCOLMO – ¿Qué queda de la OTAN y del orden transatlántico después de la tumultuosa semana del presidente norteamericano, Donald Trump, en Bruselas, el Reino Unido y Helsinki, donde defendió al presidente ruso, Vladimir Putin, contra acusaciones de una guerra cibernética de las propias agencias de inteligencia de Estados Unidos?
Si miramos cómo se desarrollan los acontecimientos con lentes color de rosa, podríamos pensar que la alianza estratégica más importante de Occidente está más o menos bien, o inclusive que se está volviendo más fuerte. En verdad, la OTAN está en peligro, y su destino hoy está depositado en las manos desdeñosas de Trump.
Antes y durante la cumbre de la OTAN, hubo mucho debate sobre el gasto militar de los estados miembro como porcentaje del PIB. Se espera que cada miembro incremente su gasto al 2% del PIB en 2024, pero Trump al parecer piensa que esto ya se debería de haber hecho. Y en la cumbre la semana pasada, de repente exigió un nuevo objetivo del 4% del PIB -que es más, inclusive, de lo que gasta Estados Unidos.
To continue reading, register now.
Subscribe now for unlimited access to everything PS has to offer.
Subscribe
As a registered user, you can enjoy more PS content every month – for free.
Register
Already have an account? Log in