

Though Polish voters in October ousted their right-wing populist government, recent elections in Slovakia and the Netherlands show that populism remains as malign and potent a political force as ever in Europe. But these outcomes also hold important lessons for the United States, where the specter of Donald Trump’s return to the White House haunts the runup to the 2024 presidential election.
ESTOCOLMO – Con la elección general en el horizonte en septiembre, los votantes suecos están siendo advertidos de que les ha llegado el turno a ellos de ser el blanco de una interferencia rusa en el proceso democrático. Según la Agencia de Contingencias Civiles de Suecia (MSB por su sigla en inglés), que lidera los esfuerzos del país para contrarrestar las operaciones de influencia extranjera, esa interferencia es muy probable, y los ciudadanos deberían estar alertas a la desinformación y las noticias falsas.
Hay un solo problema: separar las “mentiras” rusas de la realidad política desordenada de Suecia no será tarea fácil.
En los últimos meses, los troles rusos pusieron a los suecos en la mira, distribuyendo historias creíbles y rumores con mucha carga política sobre un malestar social y una decadencia moral. En un caso, agentes rusos supuestamente inundaron las redes sociales con noticias destinadas a influir en el debate sueco sobre la inmigración. La MSB dijo que el objetivo de Rusia era alimentar las disputas internas suecas y desviar la atención de las actividades rusas en otras partes de Europa.
To continue reading, register now.
Subscribe now for unlimited access to everything PS has to offer.
Subscribe
As a registered user, you can enjoy more PS content every month – for free.
Register
Already have an account? Log in