TEL AVIV – La siempre volátil región de Medio Oriente ha sido sacudida por una serie sorprendente de acontecimientos políticos surgidos de Arabia Saudita. ¿Serán los preliminares de una nueva gran guerra?
El ambicioso príncipe heredero saudita, Mohammed bin Salmán (32 años, generalmente llamado MBS), que dirige una histórica (y desestabilizadora) transformación de la economía saudita, ordenó el arresto de muchos de los príncipes y funcionarios más poderosos del país. La jugada, que se presentó como parte de una campaña anticorrupción, es un osado intento de consolidar su poder.
Pero las ambiciones de MBS trascienden las fronteras de su país. El mismo día, en un programa de televisión transmitido en vivo desde Riad, el primer ministro libanés Saad Hariri anunció su renuncia y acusó a Irán de provocar “devastación y caos” con sus intromisiones en otros países.
To continue reading, register now.
Subscribe now for unlimited access to everything PS has to offer.
After becoming the heir apparent to the Saudi throne earlier this year, Crown Prince Mohammed bin Salman has quickly consolidated his power and begun to usher in a period of radical change.
But as he overhauls the country's domestic and foreign policies, he is also heightening the risk of another conflict in the Middle East.
says the government's push for radical change could prove risky if it succeeds, and even riskier if it fails.
Ashoka Mody
explains the roots of the lack of accountability in India, highlights shortcomings in human capital and gender equality, casts doubt on the country’s ability to assume a Chinese-style role in manufacturing, and more.
While China and the US take advantage of scale to pursue large-scale investment in critical sectors, the EU struggles to follow suit, owing to its decentralized fiscal structures and rules limiting government subsidies to industry. A new EU-level investment program is urgently needed.
advocates a federal investment program, funded by EU sovereign-debt issuance and administered centrally.
TEL AVIV – La siempre volátil región de Medio Oriente ha sido sacudida por una serie sorprendente de acontecimientos políticos surgidos de Arabia Saudita. ¿Serán los preliminares de una nueva gran guerra?
El ambicioso príncipe heredero saudita, Mohammed bin Salmán (32 años, generalmente llamado MBS), que dirige una histórica (y desestabilizadora) transformación de la economía saudita, ordenó el arresto de muchos de los príncipes y funcionarios más poderosos del país. La jugada, que se presentó como parte de una campaña anticorrupción, es un osado intento de consolidar su poder.
Pero las ambiciones de MBS trascienden las fronteras de su país. El mismo día, en un programa de televisión transmitido en vivo desde Riad, el primer ministro libanés Saad Hariri anunció su renuncia y acusó a Irán de provocar “devastación y caos” con sus intromisiones en otros países.
To continue reading, register now.
Subscribe now for unlimited access to everything PS has to offer.
Subscribe
As a registered user, you can enjoy more PS content every month – for free.
Register
Already have an account? Log in