DUBÁI – Los Objetivos de Desarrollo del Milenio le dieron al mundo un marco exitoso dentro del cual encarar cuestiones sociales fundamentales como la pobreza, la salud, el hambre y la educación. Los ODM concluyen en 2015, y a partir de allí, los reemplazará una nueva agenda global de desarrollo, cuya forma y cuyo alcance ya han comenzado a debatirse. Es un momento oportuno para considerar el papel del sector privado y reflexionar sobre la actitud general de la comunidad internacional hacia el desarrollo.
El desarrollo económico es la mejor manera (en realidad, la única manera) de reducir la pobreza en forma sostenible, ya que genera un círculo virtuoso donde el crecimiento crea empleo y el empleo reduce la pobreza.
La participación del sector privado en este proceso es fundamental. Actualmente, los flujos de capital del sector privado son mucho mayores que los flujos de ayuda tradicionales del sector público. Por ejemplo, en 2010 Estados Unidos destinó al desarrollo un total de recursos equivalente a 200.000 millones de dólares, de los que el 87% provino de fuentes privadas. En cambio, en la década de 1960, el 70% de los flujos de capital hacia países en desarrollo surgió de programas oficiales de ayuda al extranjero.
To continue reading, register now.
Subscribe now for unlimited access to everything PS has to offer.
Despite an increasingly challenging economic and geopolitical environment, the global economy performed better than expected over the past year. But although analysts’ projections for 2023 were too pessimistic, it appears that consensus forecasts for the coming year may have have swung too far in the opposite direction.
worries that domestic political divisions and market volatility could exacerbate financial vulnerabilities.
If COP28 is to be judged a success, the UAE, as the summit’s host, and other hydrocarbon producers should promise to dedicate some of the windfall oil and gas profits they earned last year to accelerating the green transition in the Global South. Doing so could encourage historic and current emitters to pay their fair share.
urges oil-exporting countries to kickstart a program of green investment in the Global South at COP28.
DUBÁI – Los Objetivos de Desarrollo del Milenio le dieron al mundo un marco exitoso dentro del cual encarar cuestiones sociales fundamentales como la pobreza, la salud, el hambre y la educación. Los ODM concluyen en 2015, y a partir de allí, los reemplazará una nueva agenda global de desarrollo, cuya forma y cuyo alcance ya han comenzado a debatirse. Es un momento oportuno para considerar el papel del sector privado y reflexionar sobre la actitud general de la comunidad internacional hacia el desarrollo.
El desarrollo económico es la mejor manera (en realidad, la única manera) de reducir la pobreza en forma sostenible, ya que genera un círculo virtuoso donde el crecimiento crea empleo y el empleo reduce la pobreza.
La participación del sector privado en este proceso es fundamental. Actualmente, los flujos de capital del sector privado son mucho mayores que los flujos de ayuda tradicionales del sector público. Por ejemplo, en 2010 Estados Unidos destinó al desarrollo un total de recursos equivalente a 200.000 millones de dólares, de los que el 87% provino de fuentes privadas. En cambio, en la década de 1960, el 70% de los flujos de capital hacia países en desarrollo surgió de programas oficiales de ayuda al extranjero.
To continue reading, register now.
Subscribe now for unlimited access to everything PS has to offer.
Subscribe
As a registered user, you can enjoy more PS content every month – for free.
Register
Already have an account? Log in