technical control center gorodenkoff/Getty Images

Cómo garantizar una revolución digital

BRUSELAS – La persona que realiza una gran inversión en canales justo antes de que empiece a funcionar el ferrocarril es digna de compasión. Se puede entender, por ejemplo, que el gestor del Canal de Bridgewater (posiblemente el primer canal de Inglaterra) se opusiese con vehemencia a los planes de la línea ferroviaria Liverpool-Manchester.

Pero el avance de la tecnología no pudo detenerse, como tampoco los nuevos retos que esta planteó. Lo mismo puede decirse hoy de las innovaciones digitales. Cuando finalmente se inauguró la línea ferroviaria Liverpool-Manchester, en 1830, resultó ser un éxito revolucionario que puso en marcha la era del vapor y cambió el mundo en modos totalmente imprevisibles.

Al tiempo que nos adentrábamos en la era del ferrocarril, con la propagación de ramificaciones de vías férreas por todo el mundo en vías de industrialización, se alcanzaba un nuevo nivel de conectividad que los delincuentes no tardaron en aprovechar. En efecto, finalmente hubo que crear una nueva fuerza policial para seguir el ritmo de los tiempos.

https://prosyn.org/yETRqN1es