

From demographics to trade to GDP growth, China is currently struggling precisely where India seems to be thriving. At a time when the global economy’s center of gravity is shifting to Asia, we asked PS commentators whether India’s rising star will soon outshine China’s.
PRINCETON – Un conflicto lleva años gestándose entre el primer ministro húngaro Viktor Orbán y el Partido Popular Europeo, la organización supranacional de partidos democristianos y de centroderecha de los estados miembros de la Unión Europea. Tras largas vacilaciones, en marzo del año pasado el PPE suspendió al partido de Orbán, Fidesz, y ahora estudia su expulsión.
Motivos para hacerlo no le faltan. Fidesz no sólo destruyó la democracia y el Estado de Derecho en Hungría, sino que también ha presentado a la UE como una institución despótica a la que acusa de privar a los europeos de su libertad. Tras la suspensión de Fidesz, Orbán contraatacó diciendo que es el único defensor auténtico de la democracia cristiana y que sus críticos en el PPE están vendidos al liberalismo. Las imposturas de Orbán sedujeron a conservadores a ambos lados del Atlántico, pero la imagen que pretende proyectar es publicidad falsa.
Sería un error atribuir el conflicto entre Fidesz y el PPE ante todo a una cuestión de principios políticos, cuando básicamente es un tema de poder. Pero la cuestión de quién tiene derecho a proclamarse heredero de la democracia cristiana es muy importante para Europa, ya que históricamente, esta ha sido la principal fuerza política detrás del proyecto de integración europea.
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