NUEVA DELHI – La fecha límite para cumplir los objetivos de desarrollo del Milenio (ODM) es 2015, pero el mundo sabe que no va por buen camino para conseguirlos. Así, los líderes mundiales se van a reunir en las Naciones Unidas para realizar una evaluación exhaustiva con la intención de acordar una hoja de ruta y un plan de acción para cumplir los ODM en el plazo previsto.
Estuve en las Naciones Unidas en septiembre de 2000, cuando los líderes mundiales se reunieron en la Cumbre del Milenio y se comprometieron a trabajar conjuntamente para liberar a la humanidad “de las condiciones abyectas e inhumanas de la extrema pobreza,” y “para hacer realidad el derecho al desarrollo para todos.” Estos compromisos incluyen promesas para mejorar el acceso a la educación, a los servicios de salud, y al agua limpia para las personas más pobres del planeta; acabar con los barrios pobres; revertir la degradación ambiental; vencer la inequidad de género; y curar el VIH /SIDA.
Es una lista ambiciosa pero su piedra angular en el Objetivo 8, que hace un llamado para “fomentar una asociación global para el desarrollo.” Éste incluye metas específicas: “desarrollar aún más un sistema comercial y financiero abierto, basado en normas, previsible y no discriminatorio”; atender las necesidades especiales de los países menos desarrollados; asistir a los países sin litoral y a los pequeños Estados insulares en desarrollo; y diseñar medidas nacionales e internacionales para hacer frente a los problemas de deuda de los países en desarrollo.
NUEVA DELHI – La fecha límite para cumplir los objetivos de desarrollo del Milenio (ODM) es 2015, pero el mundo sabe que no va por buen camino para conseguirlos. Así, los líderes mundiales se van a reunir en las Naciones Unidas para realizar una evaluación exhaustiva con la intención de acordar una hoja de ruta y un plan de acción para cumplir los ODM en el plazo previsto.
Estuve en las Naciones Unidas en septiembre de 2000, cuando los líderes mundiales se reunieron en la Cumbre del Milenio y se comprometieron a trabajar conjuntamente para liberar a la humanidad “de las condiciones abyectas e inhumanas de la extrema pobreza,” y “para hacer realidad el derecho al desarrollo para todos.” Estos compromisos incluyen promesas para mejorar el acceso a la educación, a los servicios de salud, y al agua limpia para las personas más pobres del planeta; acabar con los barrios pobres; revertir la degradación ambiental; vencer la inequidad de género; y curar el VIH /SIDA.
Es una lista ambiciosa pero su piedra angular en el Objetivo 8, que hace un llamado para “fomentar una asociación global para el desarrollo.” Éste incluye metas específicas: “desarrollar aún más un sistema comercial y financiero abierto, basado en normas, previsible y no discriminatorio”; atender las necesidades especiales de los países menos desarrollados; asistir a los países sin litoral y a los pequeños Estados insulares en desarrollo; y diseñar medidas nacionales e internacionales para hacer frente a los problemas de deuda de los países en desarrollo.