theresa may Christopher Furlong - WPA Pool/Getty Images

Las duras verdades del Brexit

DUBLÍN – El plazo del 29 de marzo de 2019 para que el Reino Unido abandone la Unión Europea está cada vez más cerca, pero todavía no está nada claro cómo será en realidad la partida. Pronto será inevitable tomar decisiones. Es decir, tras dos años y medio de ir a la deriva y criticarse mutuamente, ya es hora de que todas las partes del debate sobre el Brexit en el RU empiecen a hablar con honestidad.

Aunque la primera ministra Theresa May llegó a un acuerdo con la UE, las chances de que obtenga aprobación parlamentaria antes del 14 de enero (el plazo que fijó May) se ven cada vez más exiguas, incluso con el mes adicional que se dio May para tratar de mejorarlas. Parece más bien que el RU se encamina a una elección entre dos extremos, que probablemente impliquen (los dos) otro referendo.

La primera alternativa (preferida por cada vez más parlamentarios del gobernante Partido Conservador, pero todavía no –oficialmente– por la oposición laborista) es celebrar un segundo referendo sobre el Brexit. La idea es que tras presenciar el zafarrancho político que se armó después de la estrecha victoria (51,9% a 48,1%) de los partidarios de abandonar la UE en el referendo de junio de 2016, ahora puede ser que los votantes del RU decidan que después de todo no quieren concretar el Brexit. Pero sea como sea, la idea más amplia es que si el Parlamento no puede llegar a una decisión, hay que preguntarle otra vez al pueblo.

https://prosyn.org/fvxDHsCes